
Añadir opciones tecnológicas sencillas para potenciar las actividades de evaluación formativa puede ayudar a garantizar que todos los alumnos aprovechen al máximo la lección.
Cuando piensa en la evaluación, ¿qué es lo primero que le viene a la mente? Empecé a enseñar antes de que aparecieran los iPads, y la introducción de la tecnología tuvo un profundo efecto en mi forma de pensar sobre la evaluación formativa. Las herramientas digitales son algo más que una forma rápida de revisar las respuestas a los cuestionarios en medio de la enseñanza, aunque eso sí es una ventaja. Las herramientas digitales pueden ayudar a que más estudiantes lleguen a usted y también le permiten recopilar información de mayor calidad.
A continuación te ofrecemos algunos consejos para ayudarte a comprobar la comprensión en medio de la clase. Verás que estas estrategias se basan en las mejores prácticas tradicionales. Por ejemplo, aunque una estrategia de turnos de palabra no necesita incluir la tecnología, el beneficio o el valor que la tecnología añade a esta interacción es que los estudiantes pueden compartir más ampliamente y permitirle a usted escuchar a todos los asociados.
COMPROBAR LA COMPRENSIÓN DURANTE LA CLASE
Turnos de charla: Los estudiantes conversan con un compañero de clase y luego envían sus respuestas a un espacio compartido. Esto podría incluir un tablero de discusión como Schoology, donde los estudiantes publican sus pensamientos en un hilo de discusión. También puede probar un tablero colaborativo como Padlet que ofrece algunas opciones, como agregar una nota de voz, un enlace o varias oraciones a su publicación.
Parar y anotar: Con esta estrategia, los estudiantes hacen una pausa para capturar su pensamiento de varias maneras: haciendo un dibujo en un espacio como Seesaw o añadiendo una nota adhesiva virtual a un espacio colaborativo como Jamboard. Durante un stop-and-jot se puede elegir un espacio que permita a los alumnos elegir cómo quieren plasmar su pensamiento. Las opciones podrían incluir un texto, un boceto o incluso una grabación de audio.
Pregunta rápida: Los alumnos responden a una pregunta abierta de respuesta corta, que puede darle una idea de su nivel actual de comprensión. Una herramienta interactiva como Lumio, Nearpod o Pear Deck permite a los profesores insertar una pregunta en una lección dirigida por el profesor o a su ritmo para comprobar la comprensión con una respuesta rápida.
Comprobación del pulso: Con la comprobación del pulso, los alumnos comparten su nivel de confianza, cómo se sienten o una indicación de qué más podrían necesitar para tener éxito con la lección. Puedes utilizar opciones como una nube de palabras, una escala o una clasificación con una herramienta gratuita como Mentimeter. Para que los alumnos tomen el pulso, puedes hacer una pregunta a toda la clase y que los alumnos respondan de forma anónima. Esto puede darle una lectura de la sala. También puede pedir a los alumnos que compartan una respuesta etiquetada con su nombre para poder hacer un seguimiento individualizado.
ELABORAR UN PLAN DE EVALUACIÓN FORMATIVA
Cuando planifique los momentos de la clase para comprobar la comprensión, determine primero la dirección y los resultados previstos de la lección. Sepa hacia dónde se dirige y qué le gustaría que los alumnos lograran al final de la lección o actividad. Identificar los criterios de éxito es útil durante todas las fases de la evaluación formativa, incluso en medio de la lección.
Por ejemplo, si se hace un sondeo en la clase y se descubre que la confianza de los alumnos es baja, o si se pide a los alumnos que respondan a una pregunta en un espacio de colaboración y sus respuestas suscitan dudas, se podría decidir un giro en la enseñanza basado en sus respuestas. Las comprobaciones a mitad de clase ofrecen la oportunidad de reunir a la clase para un reajuste. La información que obtenga puede llevarle a tomar medidas inmediatas, como pedir a un pequeño grupo de alumnos que han demostrado necesitar más apoyo para repasar un concepto o hacerle saber a qué debe prestar atención durante el resto de la lección.
PONER LAS IDEAS EN PRÁCTICA
¿Cuál es la mejor manera de poner en práctica estas estrategias? Elija una de las tácticas enumeradas anteriormente para incorporarla a su rutina semanal. Para empezar, puede decidir utilizar una herramienta con la que los alumnos ya estén familiarizados. De este modo, puede cambiar fácilmente la forma de utilizarla durante otras partes del día para recopilar datos de evaluación formativa procesables en medio de una lección. Por ejemplo, si ya utiliza una herramienta como Mentimeter para crear nubes de palabras al iniciar una nueva unidad de estudio, pruebe la función de escala en medio de una próxima lección para comprobar el pulso.
Cuando revise las formas en que actualmente comprueba la comprensión, elija una sola idea de la lista. Pruébala y comprueba si te convence. Si no aporta valor o no se ajusta a sus objetivos de evaluación formativa, cámbiela, pruebe otra idea y elija una para incorporarla a su rutina.
Por: Monica Burns